El microchip es el único sistema autorizado actualmente en Europa para la identificación de nuestros animales de compañía.
La legislación establece desde el año 2005 la obligación por parte de los propietarios de perros, gatos y hurones de identificar su animal desde la edad de 3 meses o bien en un plazo máximo de un mes desde su adquisición.
La implantación del microchip es un acto rápido y prácticamente indoloro, que realizamos en el transcurso de la consulta. Una vez insertado el microchip, se realiza el alta en el Registro Andaluz de Identificación Animal (RAIA) y se proporciona al propietario/a un certificado oficial provisional.